Cerca del Cumpleaños

Cada día estamos más cerca de su primer cumpleaños. Ya llegamos a la mitad, es decir seis meses, y continuando con la misma forma de festejos. Aunque algo debimos modificar debido a la fecha y al mes que transcurría. Como sabrán Febrero tiene 29 días sólo en años bisiestos y este no era el caso. Luego de una pequeña charla debate entre si era mejor utilizar el 28 (para preservar el mes) o el primero de marzo (para no adelantarnos), se decidió por la segunda opción.

Esto me hizo recordar a mi abuelo, el zeide Miguel, quien tenía este mismo dilema todos los años tras haber nacido un 29 de febrero. Además de las dos opciones que barajamos nosotros, el tenía una tercera que era cumplir un año cada cuatro (algo que una sociedad envidiosa no le dejaba hacer).
Volviendo al ruedo, el miércoles pasado entonamos la canción cumpleañera con un cuadrado de torta de manzana y aportamos a la lista de juguetes de la era post-Matias, un micro escolar de “Little People” proveniente de los EEUU.
Para aquellos que no los conocen, los “Little People” son pequeños personajes de encastre que pueden ser utilizados en los diferentes transportes o decorados que proponen sus fabricantes. También existen en formato de dibujos animados.

Dentro de la catarata de información y nuevas actividades que acumula Mati, la principal sería ingerir alimentos sólidos (como fue mencionado la semana pasada). En especial la fruta tipo pera o banana que son sus comidas preferidas. Ya esta empezando a tirar la bronca cuando uno demora en acercarle la cuchara. Aguanta sentado solo durante mucho más tiempo, te busca con la mirada, sonríe más y se comunica mucho mejor con grandes y chicos.

Con respecto a la motricidad, maneja sus manos al punto de sostener la mamadera, agarrar nuestras caras e interactuar con juguetes accionando sus mecanismos.
Parte definida de su personalidad es la simpatía, puede quedarse varios minutos fijando la vista en alguna persona hasta que esta lo mire y le hable (siempre responderá con una sonrisa).
Esto fue utilizado varias veces en las vacaciones y obteniendo muy buenos réditos como por ejemplo con las azafatas. Después de todos estos meses les puedo afirmar que tanto a Susú como a mí nos ha caído la ficha de ser Padres. Ese miedo inicial del ¿Y ahora qué hago? ya ha sido superado o esta mutando. Sin embargo, el viento fresco del comienzo no cambia sino que cada día te da más fuerte sobre la cara.